La manteca de karité destaca entre los ingredientes empleados hoy en día para la formulación de cosméticos. Es muy eficaz para pieles secas, a las que les da el chute de hidratación y nutrición que necesitan. Por este y más motivos, hoy queremos contarte qué es la manteca de karité y para qué sirve.
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¿Qué es la manteca de karité?
La manteca o mantequilla de karité es un ingrediente de origen natural empleado en cosmética por sus numerosos beneficios. Puede presentarse en formato puro, aunque es muy común que este lípido vegetal se emplee como un emoliente en las formulaciones.
¿De dónde viene la manteca de karité?
Al igual que ocurre con otros ingredientes estrella de la cosmética, como el aceite de argán, la manteca de karité también tiene su origen en África. En concreto, en países como Costa de Marfil, Malí, Sudán o Burkina Faso donde, después de 15 años de cultivo, el árbol del karité da sus frutos.
¿Cómo se saca la manteca de karité?
Los frutos del árbol del karité son muy similares a una nuez y en su interior se hallan unas almendras blancas. De ellas, se extrae la manteca de karité por medio de un proceso de triturado y tostado de las mismas.
Al mezclar con agua el resultado de triturar y tostar las almendras, se consigue una pasta cuyo aspecto es muy similar al de la mantequilla. Para que quede con la consistencia de la mantequilla es necesario evaporar el agua.
De esta forma, la también conocida como oro africano, se derretirá y permitirá filtrar y eliminar sus impurezas. Una vez hecho esto, la manteca se enfría y el resultado final es una masa espesa y densa.
Para obtener una manteca de karité pura, se puede emplear el método de la presión en frío. Así no es necesario tostar las almendras, que solo son trituradas con el objetivo de mantener todas las propiedades de la manteca de karité y que esta tenga una mayor pureza y un olor más neutro.
¿En qué es rica la manteca de karité?
Esta mantequilla de origen vegetal es rica en antioxidantes y en ácidos grasos, de los que presenta un porcentaje de entre un 85 y un 90%. Entre estos ácidos destacan los ácidos oleico, omega 6 y 9, linoleico, linolénico y esteárico.
La manteca de karité contiene también vitamina E y lípidos como los fitoesteroles o los lípidos insaponificables.
¿Para qué sirve la manteca de karité?
La mantequilla de karité tiene más de un uso y es empleada tanto en cocina como en el mundo de la cosmética, donde es un ingrediente de lo más aclamado por sus efectos hidratantes en la piel.
A pesar de esto, es de destacar que tan solo un 5% de la producción mundial de esta manteca es destinada a la industria cosmética. El motivo es que en África es muy común su utilización en la cocina tradicional. De hecho, es un ingrediente esencial para la producción de chocolate y de otros productos de confitería en el continente.
¿Para qué se utiliza la manteca de karité en la piel? Sin embargo, las mujeres africanas sabían exprimir al máximo las bondades del karité, eligiéndolo para el cuidado de sus vientres durante el embarazo, o de sus bebés una vez daban a luz.
En la actualidad sus usos en cosmética han aumentado considerablemente, ya que es parte esencial de productos para el cuidado tanto de la piel como del cabello por sus múltiples beneficios.
¿Qué beneficios tiene la manteca de karité?
El oro africano tiene múltiples usos y es que puedes hidratar tu piel con manteca de karité o utilizar este producto en tu cabello. A continuación, te damos más detalles de lo que esta mantequilla vegetal puede hacer por ti.
Manteca de karité para la piel
Explorar en el uso de la manteca de karité para la piel es esencial si sufres de sequedad o descamación. En concreto, los beneficios de la manteca de karité en la piel son muchos y muy variados.
Su principal función en la piel es la de protegerla, a la vez que es una aliada perfecta para asegurar una correcta hidratación. De esta forma, incluso las pieles más secas consiguen mejorar su aspecto, con una mayor elasticidad e hidratación. ¡De hecho, su aplicación en codos o talones con durezas es casi milagrosa!
Su uso está muy recomendado también tras la exposición solar, ya que supone un gran alivio en caso de que se produzcan quemaduras por el sol. Lo mismo ocurre con las quemaduras producidas durante la depilación. Si es algo que te ocurre a menudo, no dudes en calmar la piel con manteca de karité, ya que favorece la cicatrización de los tejidos.
Este producto se puede usar en un formato puro, aunque también existen otras opciones como jabones o leches corporales sólidas formuladas con este potente ingrediente.
¿Es buena la manteca de karité para la cara? Por supuesto, ya que en esta zona actúa regenerando celularmente la piel, suavizando y difuminando las líneas de expresión gracias a su alto contenido en vitaminas A, D, E y F.
Manteca de karité para el cabello
Si quieres lucir un pelo de ensueño, la mantequilla de karité puede ser tu solución. Aquí, el secreto está en encontrar la cantidad justa que nos deje un aspecto nutrido pero con volumen.
¿En qué tipo de pelo es eficaz la manteca de karité? La manteca de karité es aconsejable para usar sobre el pelo rizado y encrespado, pero también sobre el cabello seco.
Como ocurre con la piel, la manteca de karité actúa nutriendo y suavizando el cabello al que, además, protege y le da un aspecto brillante y pulido. Para aprovechar todos sus beneficios, lo más recomendable es emplearla como mascarilla, mezclada con aceites vegetales, como el aceite de oliva.
Si quieres cuidarte con productos naturales y zero waste, no puedes ignorar las propiedades de la manteca de karité. Los beneficios de la manteca de karité en la piel y en el cabello son variados y muy interesantes. En Kemio puedes encontrar productos elaborados a base de este ingrediente, además de otros productos ideales para tu rutina de belleza. ¡Descúbrelos todos en nuestra tienda online!
